miércoles, 17 de marzo de 2010

En Corrientes desenterraron dos tumbas NN, en busca de posibles desaparecidos...De los 58 correntinos, recién se encontraron a tres. Por Fabian Vega


La Justicia Federal y el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) exhumaron ayer dos sepulcros con restos humanos NN, en el Cementerio de Laguna Brava. Fuertes sospechas de que podrían tratarse de correntinos desaparecidos durante la última dictadura militar.

A pesar del hermetismo con que la Justicia federal de Corrientes lleva adelante la investigación; la prensa ayer fue testigo de las exhumaciones de restos óseos de personas que habrían muerto entre 1976 y 1979 y fueron enterradas como NN.
Los investigadores judiciales y forenses llegaron a esas fosas luego de una larga investigación socio histórica, que incluye varias entrevistas con testigos de la época y trabajadores del Cementerio Municipal de laguna Brava (ubicada a 15 KM. de la Capital sobre la Ruta Nº 5).
Ayer el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), bajo la supervisión del fiscal federal Flavio Ferrini, llegaron al lugar con la intención de desenterrar tres cadáveres de masculinos de entre 25 y 35 años de edad, sin identidad que podrían pertenecer a personas que fueron desaparecidas durante el Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983). Sin embargo sólo escavaron en dos tumbas y exhumaron los restos humanos.
En ninguna de las dos fosas excavadas se encontró cajón. Las evidencias y la posición en el que se hallaron los restos, hacen suponer que los cuerpos simplemente fueron arrojados al pozo y los cubrieron de tierra arenosa. Los cuerpos estaban completos y bastante conservados. El primero de los restos pertenecería a una persona que murió en 1976 y había sido encontrado en la vía pública. En aquella oportunidad los vecinos habían hecho la denuncia y la Policía los enterró en el cementerio como NN. La segunda tumba exhumada correspondía a una persona fallecida en 1977, que también fue enterrada sin ningún tipo de identificación.
La tercera tumba por ahora quedará sin desterrase. Tendría los restos de un masculino que falleció en 1979; pero del que se tienen pocas pruebas, testimonios y del que habría pocas probabilidades de que se trata de una víctima de la última dictadura militar.
Los investigadores todavía o pueden asegurar que se traten de personas víctimas de delitos de lesa humanidad, pero hay fuertes. En el relevamiento que realizaron se encontraron elementos que hacen suponer que podrían tratarse de personas perseguidas que fueron víctimas del terrorismo de estado.
“Queremos ser muy cautelosos para no levantar falsas expectativas. Más que nada por respeto de las familias que siguen buscando a sus familiares. Tampoco queremos dejar pasar una oportunidad como esta. Se van a analizar los restos para determinar finalmente las circunstancias en la que estas personas murieron o las circunstancias en las que fueron enterrados”, dijo al “Centro de Comunicación Comunitaria” una alta fuente de la Justicia Federal.
Ahora los restos óseos permanecen bajo custodia de la Justicia federal correntina. Luego serán llevadas a Buenos Aires por el EAAF, para el rearmado de los esqueletos. Después vendrán los análisis científicas y el cotejo con las muestras que hay el banco nacional de ADN.
“Una Luz de esperanza”
Así calificaron al desentierro de los familiares de desaparecidos y los integrantes de la Comisión Provincial de derechos Humanos de Corrientes (C.P.D.H.C.), que presenciaron ayer con ilusión y angustia la exhumación. “Estamos con muchas expectativas, como se da en estos casos. Siempre con la ilusión de llegar a la verdades y en busca los cuerpos de nuestros familiares que fueron desaparecidos”, comentó al “Centro de Comunicación Comunitaria” el integrante de (C.P.D.H.C.) Diego Cazorla.
Por su parte ramón Artieda (Hermano de Rómulo Artieda, cuyo cuerpo fue desenterrado en el cementerio de Empedrado por el EAAF y cuya causa motivó el juicio del RI9), agregó que “una Luz de esperanza, que nos da la ilusión de poder identificar a nuevas personas que fueron víctimas de la última dictadura militar”.
Ramón, es de los que saben manejar la angustia y la ansiedad. Le llevó más de 30 años a él y su familia poder encontrar los restos de Rómulo. Sabe que para llegar a la verdad, hay que llenarse a veces de paciencia. “Nunca vamos a dejar de buscar a nuestros familiares. Queremos saber qué pasó. Esto nos da ilusión y más fuerza para seguir en la búsqueda de la verdad y la justicia”, dijo a este diario.
Más allá de la prudencia de la Justicia Federal correntina, los cadáveres desenterrados ayer ya alimentan la esperanza de varias decenas de familias correntinas que esperan encontrar los restos de sus seres queridos.
58 desaparecidos, y sólo tres identificados
Los registros históricos indican que unos 58 correntinos fueron víctimas de la última dictadura militar del país. A poco de cumplirse el 34 aniversario de aquel trágico 24 de marzo de 1976, solo tres de ellos descansan en paz.
El primero fue Carlos Alberto Meza Marengo, que había sido enterrado en Buenos Aires como NN. Era estudiante de Derecho y militante de la JUP.
El segundo fue Rómulo Artieda. Fue detenido el 14 de Mayo de 1977 en la estación de trenes de la localidad de Burzaco (Bs. As.). Sin embargo, hasta ahora, es el único que se identificó en territorio correntino. Fue en el 2008 en la localidad de Empedrado, donde estuvo enterrado más de treinta años como NN; después del trabajo científico del EAAF.

El tercero es Juan Carlos Aguirre, un ex militante del justicialismo. Fue asesinado en Tucumán y enterrado como NN; identificado también por el EAAF este año. Actualmente sus restos descansan en Goya.

Por Fabián Vega del Centro de Comunicación Comunitaria - 16 de marzo de 2010

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