lunes, 28 de septiembre de 2009

Ulibarrie dice desconocer lo que les paso a los cuatro desparecidos...Causa "Los Cachos" Corrientes


En una nueva audiencia de la causa Ayala, la cual tiene de imputado al ex comisario Diego Ulibarrie por el secuestro y desaparición de cuatro militantes políticos, declaró la ex legisladora Araceli Mendez de Ferreira y Ricardo Adolfo Escobar. En otro sentido, el acusado dijo a la salida de la jornada desconocer del paradero de Vicente Ayala, Julio Barozzi, Orlando Romero y Jorge Saravia Acuña.
La primer testigo, Araceli Méndez de Ferreira declaró haber sido compañera de la Facultad de Derecho de Vicente “Cacho” Ayala. “Estudiamos la última materia y nos recibimos” y sostuvo que la primera detención que supo de Ayala fue en 1975.
“Él y otros estudiantes fueron puestos a disposición del Estado alojados en la dependencia de la Policía Federal”. “Fueron los primeros presos políticos que se alojaron allí”, formulo.
Remitiéndose al caso en cuestión indicó que su vinculación se dio como testigo indirecta. “En febrero de 1976 un compañero mío, Germán Domingo Britos, fue detenido por repartir volantes y llevados a la jefatura de policía de Corrientes”.
De esta manera Méndez de Ferreira narró que en la siesta del 16 de febrero “fue en carácter de abogada para la alcaldía, a tratar el caso”.
Mientras estuvo en el la jefatura de policía “ocurrió algo que nunca en mi vida de profesional me había tocado vivir, de repente se apagaron las luces y nos encerraron. Se escucharon gritos infernales y que martillaban armas”.
¿Qué clase de gritos eran? Indagó la fiscalía, a lo que ella contestó que se trataban de órdenes: “Correte, sali, cosas por el estilo”.
“La situación habrá durado unos 15 minutos. Me fui sin recibir explicaciones” indicó.
“Después recibí en mi estudio a la que creo era la esposa de Romero, quien me contó del caso de los detenidos, de esa manera atando esos cabos caigo en la cuenta de que lo que paso esa vez en la jefatura de policía fue el traslado de ellos”, afirmo.
Su compañero Britos le había dicho que efectivamente, el extraño episodio pareciera que se debió al traslado de Cacho Ayala y los otros.
Por último la testigo a pedido del tribunal reconoció el rostro de Ayala, en una foto que le fue dada y que forma parte del expediente.
En la ronda de testimonios siguió Ricardo Adolfo Escobar, quien vino desde Misiones para prestar declaración. Este dijo que haber sido parte de la Juventud Peronista y que conoció a Saravia Acuña, Ayala y a un tucumano “llamado Barozzi”, lo cual resulta confuso porque de los detenidos en el club San Martín, el proveniente de Tucumán es Orlando Romero.
Escobar dijo haber alojado en Posada a Saravia Acuña unos 15 días que, por entonces, lo conocía bajo el nombre de “Ignacio”.
Reveló que se despidió diciendo que iba a Corrientes y que si no regresaba era porque “lo habían detenido”
“Nunca más supe de él”, concluyó
Asimismo revelo haber sido el también detenido en octubre de 1976, estando siete años tras las rejas.
Terminada la ronda de testimonios se incorporó al expediente un acta de inspección ocular realizada en la dependencia de la policía federal donde se constató la celda, en la que según el testigo Juan Carlos Camino, dijo que llevaron a Vicente Ayala y Julio Barozzi.
Antes de finalizar la audiencia, las dos partes pidieron la presencia de nuevos testigos para que sumen su declaración al debate. La defensa pidió la presencia de tres personas mientras que la querella solicitó a dos.
Al final de la jornada comunicación-alterna.blogspot.com se acercó a Ulibarrie para interrogarlo: ¿ Sabe algo del paradero de los cuatro desaparecidos?.
-No lo sé.
- Qué grado de responsabilidad tiene con el caso.
-Ninguna. Soy inocente.

Por Mariano Mauriño del Centro de Comunicacion Comunitaria (Ctes.)

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