YO CONTRA TODOS, por Fernando Maurente

«Quiere llorar Lilita…? Porque se le han humedecido los ojos» agregó Bonelli en un estilo casanesco.

«Bueno…la doctora Carrió está visiblemente emocionada…se quebró…Vamos a un corte…» expresó Silvestre tratando de salvar la situación bastante difícil para ambos conductores periodísticos.

Así concluyó la extensa nota que los periodistas, empleados de Clarín, conductores del programa A DOS VOCES que se emite por el canal de cable TN realizaron a la lider del ARI.
Ningún medio electrónico, excepto el diario «Perfil», recogió periodísticamente al día siguiente el patético final de la Dra. Elisa Carrió. El diario de Fontevechia trata de dibujar una Lilita que no existió. La que participó del programa de TV en realidad fue una caricatura de la Lilita que la prensa oligárquica construyó y transformó en la niña mimada de los Multimedios. Su «descubridor», fue el Dr. Mariano Grondona quien extasiado solía decir en cámara. «Elisa, usted me recuerda al vals…».

Y así pasaron miles de segundos que el Dr. Grondona «regalaba»
a su invitada favorita, la entonces «gorda periférica».Esta lentamente cambiando su peinado, su aspecto exterior y apareció con el tiempo con un tostado caribeño que las señoras gordas envidiaban. Este mismo Dr. Grondona que habilitaba a la Carrió como socia honoraria de su programa, recomendaba al profesor Luis D´Elía no pensar…«Usted piensa demasiado» . Ahora, el mismo «productor y promotor» de Lilita acaba de encontrar en Fernando Solanas una nueva estrella de izquierda que brilla con toda su fuerza en el firmamento neoliberal. El perfil del nuevo «heroe», el Pino, es distinto a la Carrió. Posee otra matriz ideológica pero igual sirve a la heterodoxia oligárquica: «Nosotros somos pluralistas» afirma con desparpajo el presidente de la nueva «República del Plata» , Hugo Biolcatti. Las posiciones políticas de Solanas podríamos sintetizarlas como un estofado ultraizquierdista con ingredientes moralistas y un lenguaje «nacional». El planteo es muy similar a la del partido obrero que habla de una lucha entre capitalistas. Solanas arriba a una posición parecida cuando afirma que el kirchnerismo y la oposición (dirigido por la Mesa de Enlace), son lo mismo. Solanas reflota para darle un mayor sustento a sus posiciones al Pacto de Olivos.

Que otra afirmación formuló la ex diputada chaqueña en el programa a DOS VOCES?. Con su conocido estilo político del «YO CONTRA TODOS» expresó:

"ir al diálogo fue un error terrible, atroz, que diluyó el triunfo de todo el pueblo argentino y le dio a Kirchner la posibilidad de volver a provocar daño, con acciones brutales, como las de estos días. A todo esto se llegó por la ineptitud de la oposición". Desde el primer momento dije que el diálogo era una trampa y me apalearon", se lamentó y señaló que "ahora me dicen 'fuiste la única que vio lo que iba a pasar? y hace 15 días me incendiaban todos, hasta los periodistas»

Lo que Perfil no reproduce en su artículo es que la Dra. Carrió contó que durante quince días «no pude salir a la calle» y que su visita a DW con sus hijos, puede interpretarse como el alejamiento de un escenario hostil. Ella, que fue durante varios años una abonada a los canales de televisión, se encontraba con que esa misma prensa la había abandonado y la despedazaba ahora ferozmente, sin misericordia.

La exposición realizada por Lilita a los conductores del programa A DOS VOCES no coincide con la imagen que intenta vendernos Perfil. Su regreso al país fue un regreso sin gloria. El pueblo (la gente para los liberales) según lo expresado por la ex diputada la había abandonado. El siguiene párrafo es más que elocuente del drama por el que atraviesa en estos días.

«Carrió dijo que ella no puede liderar la oposición "porque a mí la Capital Federal me dejó tercera", pero pasó ahí una clara factura política a la parte de su electorado que votó a "Pino" Solanas: "ya vimos lo que pasó con la centroizquierda, que hoy vota a favor de la extensión de los superpoderes". Lilita apuntaba al crucial aporte que los bloques Solidaridad e Igualdad (SI), Encuentro Popular y Social (EPyS), Diálogo por Buenos Aires y Proyecto Sur le dieron al gobierno K para poner en marcha la trascendente sesión de Diputados».

Antes del patético final habló sobre el «pacto» Kirchner-Grondona y destiló toda su bronca, casi impotencia:

«Fue entonces que los Bonelli y Silvestre la llevaron al tema TyC, donde Lilita se despachó con otra frase tajante: "Grondona es un mafioso y se asocia ahora con la mafia de Kirchner".

Y ahora el final:

"Muchas cosas van a pasar en los próximos tres meses", aseguró con su característico tono épico y, cuando se le preguntó qué iba a pasar, a Carrió se le quebró la voz y visiblemente emocionada dijo: "No, no quiero hablar".

Las cámaras reflejaron una Carrió fuera de sí. Sin pretender ingresar a un campo que no me pertenece, la psicología, mi sensación como simple televidente es no fue un quiebre producto de la emoción. Lo que presenciamos los televidentes, fue un estallido al borde de un ataque de nervios. Aquellos que puedan acceder al video coincidirán con mi percepción.

No vamos a sumarnos al descuartizamiento de esta mujer fuera de sí. Creo que lo importante es ubicar la vertiente ideológica, la matriz de su pensamiento para poder explicar su «intransigencia» sin concesiones frente al gobierno. Ese «YO CONTRA TODOS» que ha sido el eje de su política precisamente es una expresión política que perteneció a Leandro Alem formulada en la legislatura del siglo XIX como representante del partido Republicano una fugaz experiencia política, desgajamiento del autonomismo bonaerense.

Es la Dra. Carrió la versión femenina de Alem.

Releyendo una magistral obra de Jorge Spilimbergo «Historia crítica del radicalismo» podemos encontrar en Alem rasgos políticos que son el antecedente histórico de la dirigente radical. Carrió es sarmientina, mitrista y alemnista, no yrigoyenista.

Para ella el «régimen» es el kirchnerismo, «el poder» está en la Casa Rosada. Es la figura de Néstor Kirchner su enemigo principal. Su obsesión. Confunde diálogo con pacto y se embarca en una intransigencia suicida. Ha dicho de Kirchner que es un dictador, un delincuente. Frente a las cámaras de televisión acuñó la teoría según la cual el ex presidente impedíría a Cristina gobernar. Una manera de descalificar la inteligencia y la independencia política de la presidenta. Llegó a afirmar públicamente que Cristina era una mujer golpeada (sic) por su marido.

«Alem –nos dice Spilimbergo- para salvar «la democracia» frente a la probable cuasidictadura de Roca, apoya la dictadura autónoma y violentamente antinacional de Mitre». Esta posición «principista» es la que lleva a la Carrió a pactar con la Mesa de Enlace y el mitrismo expresado en la Sociedad Rural y realizar una oposición irracional hacia el gobierno de los Kirchner que la obliga hacia adentro de su partido a ejercer un acentuado autoritarismo que la deja con el tiempo en la más profunda soledad. Todo lo que construye lo destruye con su centralismo personal.

No cabe aquí expresar que el pasado fue tragedia y el presente comedia. La historia nos presenta ambos momentos realmente como tragedia, ciega a aquellos a quienes quiere perder.

Fernando Maurente